lunes, 6 de octubre de 2008

Carnivale... ¡no lo dejes ir!


Para los que no tuvieron oportunidad de verlo, llega Carnivale, la fabulosa serie de HBO que ahora transmite I-sat todos los domingos a las 22 hs. El primer capítulo, “Milfay” se emitió este último domingo (confieso que me enteré tarde de su re-transmisión, sino avisaba con anticipación).
La cinta se centra en la post-depresión estadounidense del 29. Carnivale es el nombre del show montado por un gran e interesante grupo de freaks, que van por todos los pequeños pueblos nacientes del sur de California. Dos historias se dan cita en este escenario: la de Ben Hawkins, un joven con poderes extraordinarios que le generan culpa y confusión y que empezará a descubrir y descubrirse poco a poco cuando se una a Carnivale, y el Hermano Justin Crowe, un pastor metodista que vive con su hermana Iris en California, y quien, al igual que Ben, posee extraños poderes (que cree utilizar para el bien de su iglesia). El hermano Justin comparte los bizarros sueños de Ben, pero ignora completamente su existencia.



En cada capítulo se van develando más y más pistas sobre Ben y Justin, y sobre otros personajes que en conjunto armarán un gran rompecabezas, por lo que se hace necesario no perderle atención a ningún mínimo detalle.
Muchos críticos dicen que Carnivale tiene mucho de Twin Peaks, así que no hace falta decir mucho más… bueno si, que Michael Anderson (el queridísimo y "pequeño” Samson), también actuó en la serie dirigida por David Lynch.
La ambientación de la época gracias a la fotografía de una calidad artística sublime y el vestuario y los decorados “soberbios” como diría Feinmann, le dan un brillo estético memorable, que por momentos roza el surrealismo. En cuanto a las performances, todos le aportan un toque mágico a esta serie, pero sin duda se destacan Michael Anderson (Samson), Clancy Brown (Brother Justin Crowe) y Amy Madigan (Iris), aunque párrafo aparte merece Nick Stahl (Ben Hawkins), un actor que puede interpretar cualquier papel sobre la tierra de la manera más atrevida posible (aunque algunos digan que "esconde algo").
Todo este combo hace de Carnivale un producto televisivo inédito por el que vale la pena, aunque sea, echar un vistazo. No viene mal recordar que actualmente la oferta de ideas está tan en picada como las finanzas, y el hecho de que se repita una masterpiece como esta (yo diría: un todo-cinematográfico) es de celebrar.
Así que los fanáticos de las que llamo “series puzzle” al estilo Lost, seguramente disfrutarán esta gran historia, ya de culto, de 24 capítulos (12 cada temporada).
Yo les doy un consejo: hagan como Ben, y súbanse a la caravana de Carnivale...

¡ NO SE LA PIERDAN !


GGss

1 comentario:

Marian dijo...

Un blog plasmado de brillantes cineastas... Completamos la clase de Análisis y Narrativa del cine. Está bueno para aprender un poco