sábado, 14 de junio de 2008

VANE es integrada...YO apocalíptica

Este posteo surge de charlas rizomáticas que tenemos con mi amiga Vane a diario, ya sea face to face, por teléfono, chat o mensaje sms (como ella dice, “si no nos mandamos mensajes cada 108 minutos, el mundo va a explotar"…como en “LOST”). La cuestión es que nunca nos ponemos de acuerdo (cosa que me encanta) sobre la función y fin de las nuevas tecnologías.
Umberto Eco plantea una doble postura ante la cultura de masas: la de los apocalípticos, que ven en ella la «anticultura», el signo de una caída irrecuperable, y la de los integrados, que creen optimistamente que estamos viviendo una magnífica generalización del marco cultural. Esto me pareció el marco justo para reflexionar un poco sobre esta pelea, en la que cada round plantea un disparador distinto, muchas veces, el propio posteo.
Vane está siempre al tanto de todo lo nuevo que llega a nuestras vidas, es fan de las excentricidades tecnológicas (aunque esto no la convierte en una tecnosexual, Dios no lo quiera), le gusta curiosear, se da maña para hacer funcionar todo lo que llega a sus manos, y puede estar horas delante de la Señora PC para entender cómo funciona un programa.
Yo en cambio quisiera haber nacido unos años antes….bueno, bastantes años antes, para no vivir en la selva tecnológica de hoy. Si, reconozco que nos da más de lo que nos saca, nos trae el mundo, nos presenta el infinito, el universo, nos da la posibilidad de crear, de elegir, de opinar, de personalizar a gusto e piecere, nos da la inmediatez, la rapidez (algo que, una persona que es la encarnación de la impaciencia, como yo, llega a adorar). La tecnología extendió nuestro sistema nervioso, como decía el gran McLuhan, eso está a la vista. Pero aún así, hubiese querido nacer en una época de la historia en la que mi cuerpo hubiese estado menos prolongado. A menudo la gente me dice que soy una viejita de 80 encubierta, debido a mi insistencia en que todo pasado fue mejor (también porque soy amante de las pelis del 70 para atrás, y por mi amor y devoción hacia Humprey Bogart y el “tan-hermoso-que-no-parece-real” Paul Newman).
La cosa es que, como ya he dicho en algún posteo, el hecho de que el hombre esté estableciendo tantas relaciones latourianas con no-humanos, me da mala espina, porque le tengo terror a la soledad del ser, a que nos volvamos obsoletos como seres humanos, a que finalmente seamos reemplazados… Sí señores, le temo a la utopía terminatoriana, y por eso seguiré posteando incansablemente al respecto (digamos que “Terminator” fue una de mis pelis de cabecera en mi infancia, así que me influyó y lo sigue haciendo…bien por James Cameron).
Me parece perfecto que existan artefactos bizarros que nunca pensamos que podían llegar a materializarse, me parece perfecto que la vida sea más fácil, me parece alucinante que nos podamos comunicar con la galaxia entera sin mover un dedo casi. Me encantó el telectroscopio, festejé la llegada del celular (la del televisor aún más, pero ya estaba en mi vida cuando llegué al mundo), así como bajarme pelis que ni a palos conseguiría en el video club o cualquier negocio, me sentí aliviada cuando zafé de ir a ver un bodrio al cine gracias a la info que busqué en Internet.
Lo que no celebré fue ver mi casa desde Google Earth, ni a la gente tomando sol en la costa mexicana. No me gustó saber que hay un instituto para gente adicta a Internet en Corea del Sur, ni que a mi tío le hackearon la tarjeta de crédito e hicieron compras por no se cuantos euros en Bélgica. Tampoco me gusta que ya se me esté haciendo un hábito dejar de ir a la casa de revelado de fotos, ni saber de antemano la carita que va a tener la beba de mi amiga Nay antes de nacer (me impresionó todo lo que las ecografías 4D muestran…ahora los bebés van a poder conocerse como fetos), y no me alucina para nada la idea de que puedan ubicarte en cualquier momento y lugar (esa dualidad que tengo con el celular).
Y me niego a leer desde la compu, por favor, a los dueños de las editoriales, sigan haciendo diarios de papel…no me rompan la ilusión!!! Y por favor!!! Second Life???…realmente me fastidia!!!
Por todo esto y muchísimo más es que amo y odio a la tecnología, y no puedo dejar de sentir que en un futuro no tan lejano el resto de humanidad que nos queda desaparecerá por completo…es triste pero me cuesta verlo de otra manera…hay algo que huele mal en todo esto. En realidad, let’s face it, me cuesta ponerme de acuerdo conmigo misma…por eso me hace bien postear, porque las neuronas como que toman oxígeno…
No quiero decir que en la edad media o en la Grecia antigua no hayan tenido que interactuar e hibridarse con otros no-humanos, en eso Latour tiene razón, y es hasta brillante el desarrollo que hace, pero temo que estamos de a poco llegando al tope. Ya la no-humanidad nos está sobrepasando…no necesitamos más del otro. Con respecto a esto quiero recomendar una peli bastante pochoclera y yanquilandesca, pero que está buena para pensar el tema del “me chupa dos huevos tu vida”. Se trata de “Sin rastro” (Untraceable, el título original), no vale mucho comentarla…es un buen thriller, ideal para ver en pantalla grande y punto. Pero a mí me movilizó un poco, si bien estaba al tanto de lo que hoy la gente llega a permitir…Reconozco que quizás la película exagera un poco (viniendo de yanquilandia todo es posible…y es lo que los caracteriza aparte).



Sinopsis:
El FBI cuenta con un departamento que se dedica únicamente a investigar y perseguir a los delincuentes que actúan en Internet. La agente especial Jennifer Marsh (Diane Lane) creía haberlo visto todo... hasta ahora. Un depredador cibernético cuelga torturas y asesinatos en su página web “KILLWITHME” (1). El destino de sus prisioneros depende del público: cuantas más visitas registre su página web, más deprisa morirán las víctimas. Cuando el juego del gato y el ratón se convierte en algo personal, Jennifer Marsh y su equipo deberán lanzarse a una carrera contrarreloj para encontrar a este genio de la técnica prácticamente ilocalizable.


Como usuaria de los medios me siento muy habitualmente como una “extranjera”, como dice García Canclini, pero una extranjera autosegregada, que tiene y debe incluirse para no quedar al margen, en una eterna alfabetización tecnológica.

Las cartas están echadas y el futuro hará lo suyo. Yo sigo aquí plantada, siendo una orgullosa apocalíptica.
El que opine lo contrario que me convenza de ello…Vane aún no ha podido.
GGss
(1) Este sitio en realidad existe, pero pertenece al FBI, a una división que se dedica a perseguir criminales en Internet.

3 comentarios:

vanemaz dijo...

que linda catarsis, pero la hiciste en un no-humano.... jeje...

como dijo siempre los extremos son malos, y para mi punto de vista lo que tenemos que aprender es sacar de todo lo que nos llega lo que nos puede ser util y dar un poco satisfacción... algo asi quise decir cuando cree la entrada de "nos identificamos???"...

como siempre maru es loable tu poder para dejar fluir en palabras aquello que pensas... y sabes que es lo mas gratificante, que si no nos vamos a poner nunca de acuerdo...

Anónimo dijo...

"Ni los excesos, ni los defecto, sino lo q importa es el punto medio".(Aristóteles)

Guilla dijo...

Hola. Creo que vane no es integrada, la tipa se da maña para todo porque su lema es "esto a mi no me va a ganar" jejejjeje es como el dédalo que vive enebrabdo el hilo de absolutamente todo, no solamente de la última tecno, en el sentido laturiano /como vos decis maru/. Pero creo que hay que ser un poco mas optimista, vos misma lo sugeris cuando decis que t gusta leer el diario en papel. hay que elegir, por ejemplo yo prefiero ir mil veces a la granja de la beba, a la tiendita de graciela, al cine el cairo /ya no existe/ antes que ir al chopin, a comprarme un trozo de tela, a ver una peli en una salita 2 X 2, a comerme una *"@%6 del madonals.
no creo que vos seas una apocaliptica y yo tampoco , pero tampoco soy integrada... hay tanta rapidez hoy en día qu eel sujeto no puede filtrar los muchisimos estímulos qu eemanana de estos no humanos.... y de alguna forma uno naturaliza.
te quiero mucho guille. Vamos loza CARPE DIEM. el humano sera por siempre irremplazable